Para las familias que se acojan a los programas, las subvenciones a las que podrán optar van del 35% hasta el 70%. Tomando como ejemplo una subvención media del 50% y la rebaja fiscal media del 40%, el resultado sería que el 90% del coste de la obra quedaría cubierto por los incentivos previstos. El beneficio que se va a obtener siempre se calcula en función del ahorro en el consumo de energía que se consiga con la mejora del inmueble. Para obtener una deducción del 20% en el IRPF bastará con reducir un 7% la demanda de calefacción o refrigeración de la vivienda. Si se logra reducir un 30% o más el consumo de energía primaria procedente de fuentes no renovables, entonces el beneficio fiscal ya se elevará hasta un 40%. Habrá que acreditar la mejora en el certificado de eficiencia energética de la vivienda. No se aplica, a segundas residencias.
REHABILITACIÓN de VIVIENDAS con 450 MILLONES de FONDOS EUROPEOS.
mayo 13, 2021